Acogedora casa con tejado y de estilo colonial en Puntallana.

MIMA Properties ofrece una casa tradicional de estilo colonial a solo unos metros del mercadillo de Puntallana.
La casa de 151 m2 de dos plantas, está emplazada sobre un terreno de 356 m2. La vivienda propiamente dicha está ubicada en la primera planta y consiste en un amplio y cómodo salón con puerta al patio y un ventanal hacia el lado opuesto que lo hacen muy luminoso, una funcional open-office, un alegre comedor con alacena empotrada en la pared del estilo de la época de su construcción, una cocina, un espacioso y moderno baño que se utiliza también como cuarto de lavado, y finalmente el dormitorio principal ubicado al otro lado del salón con armario de pared a pared.
En la Planta Baja se encuentra un local de 55m2 que en la actualidad se utiliza como un  dormitorio adicional, con entrada independiente, aquí también se encuentra la escalera de tea que lleva a la primera planta. 
La casa en general es muy iluminada al tener casi todos los ambientes altas puertas y grandes ventanales con vista al patio o al exterior; la escalera y los marcos de las puertas y ventanas son de madera, el techo y piso de algunas habitaciones son de madera de tea y otros aún conservan los mosaicos originales, mientras que el resto ya son de cerámica; y el techo cubierto con teja francesa.
Adicionalmente, la vivienda cuenta con un jardín en dos andenes al lado de la casa y sobre él un amplio patio con la barbacoa.
Esta propiedad es ideal para los que les gusta vivir en una zona urbana pero muy tranquila, donde se respire paz y sosiego, es decir teniendo muy cerca todos los servicios y a la vez la impresionante naturaleza que caracteriza a la isla. Desde esta vivienda se puede ir fácilmente caminando tanto al banco y resto de servicios como supermercado, farmacia, colegio, etc. y también, cómo no, dar un paseo por la casa Luján, uno de los atractivos turísticos de esta zona y disfrutar del hermoso paisaje de los alrededores.

¡PARA INVERSORES! Al estar ubicado en el centro de Puntallana y cerca de la carretera general, la planta baja se puede destinar al comercio, como un bar o café por ejemplo para atender la demanda del turismo que se dirige hacia el norte de la isla.