Jacobo Hernández Sanz
Buenos días, a continuación les explico grosso modo mi experiencia con el colectivo de inmigrantes como Integrador Social.
He trabajado con inmigrantes como monitor en el albergue municipal de Valladolid, el cual gestiona Cruz Roja Española y en el que hace años estuve como voluntario.
Realicé mis prácticas como Integrador Social en el área de inmigración, también en Cruz Roja Española, atendiendo a las personas que lo solicitan en lo que llamamos "Primera acogida", la cual, se trata de una primera entrevista personal para conocer y valorar de manera inicial la situación personal de cada persona solicitante de ayuda, intentando recopilar con el mayor respeto a la persona, la mayor cantidad de información posible respecto a ella (por qué vino a España...cuánto tiempo lleva...si tiene a algún familiar o alguien conocido en España...cómo es su situación económica, familiar, de salud, de trabajo...etc.) Conocer también sus demandas y lo que podríamos satisfacer con respecto a ellas, para después derivar a cada usuario o usuaria, si fuese necesario, al programa de empleo, programa de idiomas, programa de ayuda de alimentos, etc.
Además de la primera acogida también realizaba el seguimiento de un piso en el que convivían cuatro personas, todas ellas inmigrantes de diferentes nacionalidades, realizando visitas en el propio piso dos veces por semana para hablar con ellos, tratar de resolver problemas de convivencia, preguntarles cómo estaban (anímicamente, físicamente…) si necesitaban algo o qué tenían planeado de cara a un futuro más o menos próximo…para después ponerlo en común con la trabajadora social.
En cuanto a talleres, he realizado varios en el centro penitenciario de Valladolid, en el módulo de jóvenes reclusos (de 18 a 25 años), tocando diversas temáticas, como son: El miedo al cambio y la zona de confort, el consumo de drogas, el respeto a los demás, etc.
También he realizado acompañamientos a personas enfermas de vih, tanto a médicos, como acompañamientos terapéuticos dentro y fuera del domicilio.
Respecto a mi labor como monitor del albergue municipal, ésta consistía en atender de la mejor manera y forma posible a todos los usuarios y usuarias que acuden al mismo para no dormir en la calle.
El albergue cuenta con 46 plazas para hombres, de las cuales, siempre se procura que el número de plazas disponibles se reparta entre personas españolas e inmigrantes, quedando de la mejor forma posible 23 plazas para personas españolas y 23 plazas para personas inmigrantes. Para las mujeres cuenta con 12 plazas y aunque casi siempre hay plazas disponibles, se actuaría de la misma manera. Hay que tener en cuenta que cada personas es diferente y cada una de ellas cuenta con sus demandas, su estado de ánimo, posibles adicciones, vida personal, enfermedad mental en muchos casos, el estado ebrio en el que acuden algunos de ellos o de consumo de otras sustancias etc. por lo que es indispensable el trabajo en equipo, la empatía, la paciencia y la resolución de conflictos que en ocasiones se producen entre los propios usuarios o entre los usuarios y los monitores.
En cuanto a los idiomas, manejo un inglés para poder mantener una conversación básica, pero si fuese necesario no me importaría volver a estudiarlo para mejorar mi nivel.
Para contrastar la información pueden ponerse en contacto con: Laura Ortega, del departamento de inmigración, Magdalena Palomo, responsable del albergue municipal o Natalia, del departamento de personal, les adjunto teléfono de Cruz Roja Española en Valladolid: 983 13 28 28
Como último decirles que aunque ahora mismo no resido en la localidad del puesto ofertado, estaría dispuesto a realizar un cambio de residencia, ya que quiero seguir desarrollándome como profesional en el ámbito social y esta oferta se ajusta a mis expectativas, un saludo y gracias por su atención.
- Creado: 07-02-18
- Última sesión: 14-03-18